En 1984, la apertura de una nueva exposición en San Javier, conlleva la incorporación de Juana Mari.
En el local se exponen tanto muebles de fabricación propia como otros de compra-venta. Pero pronto se observa que los clientes se muestran más interesados por nuestros productos, debido a la fabricación a medida y la alta calidad. La empresa se centra en sus fabricados y considera que debe añadir otro valor, el diseño.
Juana Mari, apasionada del diseño y que siempre destacó en dibujo y manualidades, inicia estudios de interiorismo.